Introducción
El XVIII acontece en un tiempo muy particular, ya que se realiza en el año que celebramos los 100 años de cumplirse el sueño de Juana de Lestonnac: la Unión de todas las Casas, ser un Cuerpo Apostólico con un Gobierno General.
Celebrando ese sueño de Juana, que tres siglos después se hizo realidad, y agradeciendo todo lo que ha significado para la Compañía, en este mes de mayo compartiremos algunas frases que nos invitan a hacer memoria de nuestras raíces, de las podas, de los brotes nuevos, de los árboles que hoy dan sombra y abrigo, de lo que deseamos que siga creciendo…
Y trataremos de actualizar, en nuestra realidad de hoy, cada una de estas frases, a través de una sugerencia de reflexión, a través de unas preguntas.

¿Cómo puedo, podemos, cuidar y potenciar hoy este don?…

¿De qué maneras podemos celebrar y compartir esta alegría y esperanza?..

¿A través de qué gestos y acciones estoy uniendo mis manos a las suyas?..

En mis experiencias de pasar la prueba del tiempo y de la espera, ¿qué he aprendido?..

En mi trayectoria personal, familiar, comunitaria, laboral… ¿qué he tenido que adaptar, adecuar… para seguir adelante?..

¿Cómo podemos cuidar hoy este espíritu de comunicación?

¿Qué dificultades actuales hacen necesario que unamos nuestras fuerzas?

¿Cómo María nos inspira HOY para dar respuesta a los desafíos que tenemos?

Concretamente, ¿cómo lo podemos construir hoy, en nuestro contexto?

¿Cómo expresamos hoy, en nuestra realidad este impulso misionero?

¿Qué tareas diferentes, hoy configuran el Cuerpo Apostólico Compañía de María?

¿Qué diferencias están siendo hoy motivo de complementariedad?

¿Cómo podemos continuar potenciando esta dimensión de nuestra vida?

Compartimos algunas experiencias apostólicas que confirman esta frase.

¿A qué fronteras estamos siendo llamadas/os hoy? ¿Cómo podríamos acudir a ellas o atenderlas?

¿Cómo los estamos conjugando? ¿Cómo podemos conjugarlos mejor?

¿Qué respuestas estamos dando en forma conjunta?
¿A qué “más” estamos invitadas/os en este camino?

Compartimos experiencias que estamos viviendo con otros y otras,
¿Qué posibilitan? ¿Qué aprendemos…?

¿Qué le agradecemos a la Red Laical? ¿Qué le pedimos, o sugerimos para su caminar?

¿Cómo podemos cuidar y potenciar hoy este vínculo?

¿Cuál es hoy el “más” para la misión? ¿Qué panes y peces poner en común para vivirla?

¿Qué nos brinda y posibilita ser Cuerpo Apostólico Universal?

¿De qué manera hoy nuestras manos están dando y recibiendo?

En nuestra realidad, ¿qué es lo que más nos ayuda a construir Cuerpo?

¿Qué nos está pidiendo la interrelación para cuidarla, acrecentarla, crearla…?

Expresamos lo que deseo agradecer a nuestras raíces…

Reconozco todo y todos, los que me han ido construyendo… y doy gracias

¿Cuál es hoy el sueño de Dios, para el que me necesita? ¿Yo que puedo aportar?

¡Agradezco ser parte de este acontecimiento!